NTERCAMBIADORES, la tradición del CHOPO.
Tienen su lugar de reunión aúlica, de venta, de fiesta, ininterrumpida: melómanos y coleccionistas de vinilos, que en el CHOPO, jamás se extinguieron y este año están viviendo un revival espectacular: ya los hay nuevos de 200 gramos de peso: verdadera aristocracia de éxtasis para los oídos avezados en rock y jazz.
Con toda su erudición deambulan por los pasillos: si te acercas a conocerlos, verlos y escucharlos te apropias de lo esencial del rock. Estos rapsodas saben que escuchar los acetatos es un placer y hablar de ellos, lo multiplican. Son el sinécdoque del CHOPO, lo contienen, lo simbolizan.
Al caer la tarde, como a las cuatro, se reúnen en una casona rectangular de amplio patio donde siguen charlando, intercambiando efusivamente y adoctrinando al que asista, al ritmo de las cervezas frías.
Los intercambiadores son los creadores del CHOPO, donde inventaron esta forma de, cambio, trueque, venta de música rock: y han sido 33 años de persistencia.
Plegaria a los astros, al azar, y a la fortuna:¡estrellas de la vía láctea, zahoríes, gitanas, brujos: sigan perseverando haciendo conjuros, deseando que siempre haya intercambiadores en la Babilonia oculta del rock, con sus acetatos y su biblioteca melómana a cuestas, que así sea!
Tienen su lugar de reunión aúlica, de venta, de fiesta, ininterrumpida: melómanos y coleccionistas de vinilos, que en el CHOPO, jamás se extinguieron y este año están viviendo un revival espectacular: ya los hay nuevos de 200 gramos de peso: verdadera aristocracia de éxtasis para los oídos avezados en rock y jazz.
Con toda su erudición deambulan por los pasillos: si te acercas a conocerlos, verlos y escucharlos te apropias de lo esencial del rock. Estos rapsodas saben que escuchar los acetatos es un placer y hablar de ellos, lo multiplican. Son el sinécdoque del CHOPO, lo contienen, lo simbolizan.
Al caer la tarde, como a las cuatro, se reúnen en una casona rectangular de amplio patio donde siguen charlando, intercambiando efusivamente y adoctrinando al que asista, al ritmo de las cervezas frías.
Los intercambiadores son los creadores del CHOPO, donde inventaron esta forma de, cambio, trueque, venta de música rock: y han sido 33 años de persistencia.
Plegaria a los astros, al azar, y a la fortuna:¡estrellas de la vía láctea, zahoríes, gitanas, brujos: sigan perseverando haciendo conjuros, deseando que siempre haya intercambiadores en la Babilonia oculta del rock, con sus acetatos y su biblioteca melómana a cuestas, que así sea!
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