JULIEN TEMPLE EN EL CHOPO.
Me lo presenta mi amigo QUIQUE FALCÓN-melómano, fotógrafo, escritor, cinéfilo-: lo aprecio tan afable y comunicativo que aprovecho y le pregunto cuanta chismografía recuerdo. Me deja hablar, responde sonriente a todo, tranquilo: la fama afecta poco a este cineasta sui generis sinécdoque de documentales y filmes sobre rock... y acabamos hablando de cine polaco. Si "somos del mismo tallarín"=la misma edad, hemos compartido generacionalmente, a la distancia, mucho de la misma música y cine: de ahí la empatía automática. Ja ja: los dos "hablamos con las manos". Se despide invitándome a ir a ver su reciente filme: yo le obsequio filmes del mejor director del mundo.
Me lo presenta mi amigo QUIQUE FALCÓN-melómano, fotógrafo, escritor, cinéfilo-: lo aprecio tan afable y comunicativo que aprovecho y le pregunto cuanta chismografía recuerdo. Me deja hablar, responde sonriente a todo, tranquilo: la fama afecta poco a este cineasta sui generis sinécdoque de documentales y filmes sobre rock... y acabamos hablando de cine polaco. Si "somos del mismo tallarín"=la misma edad, hemos compartido generacionalmente, a la distancia, mucho de la misma música y cine: de ahí la empatía automática. Ja ja: los dos "hablamos con las manos". Se despide invitándome a ir a ver su reciente filme: yo le obsequio filmes del mejor director del mundo.
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